sábado, 20 de junio de 2009

El gobierno norteamericano debe escuchar el reclamo universal de justicia

• Llamamiento de las mujeres cubanas 

Queridas hermanas:

Bien conocemos los cubanos y cubanas las pretensiones de las administraciones norteamericanas por destruir a la Revolución y poner fin a un proyecto social que se sustenta en la fortaleza de sus ideas y su obra. Nuestro pueblo ha tenido la osadía de enfrentarse al afán dominador del imperialismo norteamericano, por ello, la decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos de no revisar el caso de nuestros Cinco compatriotas injustamente encarcelados en aquel país por luchar contra el terrorismo, no nos ha tomado por sorpresa. 

Avergüenza identificar la doble moral de un gobierno que quiere hacer creer al mundo que lucha contra el terrorismo, mientras lo gesta, lo ampara, lo protege; y mantiene injustamente encarcelados a hombres que con su digno comportamiento impidieron que familias cubanas y norteamericanas lloraran la pérdida de un ser querido, como resultado de un vil acto de terrorismo.

Casi once años llevan encerrados injustamente, sin derecho a un juicio imparcial, víctimas del voraz odio de la mafia cubano-americana, que impuso sus influencias para amañar el proceso judicial que condenó fraudulentamente a Gerardo, Ramón, Fernando, René y Antonio

El gobierno norteamericano, enfrascado en recomponer la maltrecha imagen heredada de la anterior administración, ha desconocido el reclamo universal que le hicieran parlamentarios, abogados, destacadas personalidades políticas y académicas, 10 Premios Nobel, en favor de la justicia y la credibilidad del sistema judicial estadounidense. 

Las federadas cubanas sentimos en carne propia el dolor que produce este nuevo golpe a la dignidad humana, a la justicia, al respeto del derecho internacional. 

Es difícil consolar a las ancianas madres, que ven alejarse la posibilidad de esperarlos con suficientes fuerzas vitales a su regreso; es doloroso pensar en las esposas cuyas vidas de pareja se han truncado y solo se mantienen por ese milagro que opera en las fusiones basadas sobre todo en la identidad de principios y en la coincidencia de valores de vida. Es penoso siquiera pensar y ponerse en el lugar de Olga Salanueva y Adriana Pérez, injusta y obstinadamente condenadas a no ver a sus esposos por la reiterada negativa de visas. Sabemos que no es casual, que es un modo ilegal, cruel, de manipular el derecho a la comunicación con el fin de doblegarlos políticamente y quebrar los pilares que sostienen a tan sólidas familias.

Las federadas cubanas llamamos a nuestras amigas en todo el mundo y en particular, a las madres, abuelas, mujeres norteamericanas, a realizar acciones de todo tipo; por pequeñas y modestas que parezcan, para quebrar el silencio sobre este caso; para informar y esclarecer; para promover solidaridad, justicia y la sensibilidad necesaria que mueva la opinión pública mundial y nos permita a las mujeres cubanas, a las familias de los Cinco, compartir y disfrutar el regreso a la Patria, que los espera orgullosa.

¡Confiamos en que los vínculos de las mujeres en todo el planeta puedan forzar a que triunfe la verdad y se haga justicia, aún en una sociedad basada en el egoísmo y el individualismo como lo es la sociedad norteamericana!

¡Confiamos en los muchos ciudadanos norteamericanos honestos que han defendido una relación, respetuosa con Cuba: sin bloqueo, sin presiones, ni agresiones!

¡Hagamos todas, unidas por los valores universales de la justicia, el amor, la solidaridad, que el gobierno de los Estados Unidos y sus tentáculos del poder judicial sientan la vergüenza de una acción tan deleznable como la que acaba de tener lugar! ¡Forcemos con nuestra firmeza y convicciones a que se haga justicia!

Secretariado Nacional de la Federación de Mujeres Cubanas

viernes, 19 de junio de 2009

Mensaje de René González

Queridos compatriotas. Amigos de todo el mundo: 

Una vez más, la mascarilla judicial de la sociedad más hipócrita jamás erigida se deshace, dejando al descubierto el rostro verdadero del imperialismo norteamericano y abofeteando la conciencia del mundo con un cínico mensaje: No serán sus propias leyes las que les impidan garantizar la impunidad a sus terroristas. 

No ha tomado mucho para que comprendamos lo que en el argot del establishment norteamericano significa -al menos cuando se trata de Cuba- la palabra cambio. La madeja de crímenes, genocidios, arrogancia y bajezas sobre la que se ha tejido la psiquis de este imperio no se desenredará por la elección de un carismático presidente, oportunamente sacado de entre un sector aun oprimido del pueblo norteamericano. Para nosotros cinco, sometidos a más de una década de ensañamiento ruin y cobarde, no es más que la reiteración de una familiar moraleja: No importa cuan bajo hayan podido caer nuestros captores, ellos siempre podrán demostrarnos su infinita capacidad de rebajarse aun más. 

Para nosotros y para nuestras familias, ya cualquier momento sería demasiado tarde para recibir justicia. También lo será para los pueblos nativos diezmados; para los países cuyos territorios han sido usurpados; para los millones de seres humanos incinerados vivos por bombas incendiarias, o desaparecidos por dictaduras cómplices, o torturados bajo la asesoría de oficiales yankees, o masacrados alrededor del mundo por apetencias corporativas. Es demasiado tarde para hacer justicia a las miles de víctimas del terrorismo contra Cuba; terrorismo cuya prevención es nuestro imperdonable crimen. 

Frente a esos millones de víctimas; niños inocentes de todas las edades; ciudadanos de todas las razas y credos convertidos, bajo las más disímiles y ordinarias circunstancias, en daños colaterales; seres humanos privados del elemental derecho a la vida en la seguridad de sus hogares, en el seno de sus familias o arrancados abruptamente y sin aviso a la cotidianeidad; nosotros cinco somos afortunados. Somos cinco soldados, ocupantes conscientes y orgullosos de una trinchera, que hemos escogido levantarnos por algo antes que caer por nada, espejo vivo de la moral de un pueblo en que el enemigo ve reflejados, lleno de impotencia y rabia, su falta de valores, su pobreza de espíritu, la fragilidad de su autoimagen y todas sus miserias. Somos cinco revolucionarios cubanos a los que no podrán doblegar jamás, y habrán de vivir cada día la humillación de ser incapaces de entender el porqué. 

Para los pueblos de todo el mundo la desfachatez de este proceso es la reiteración de una vieja lección: Enfrentamos un imperio que no reparará en cualquier crimen, conque sólo calcule que se podrá salir con la suya. No habrá consideración ética o clamor universal que les haga detenerse, sólo el precio que les imponga la resistencia. 

Para el pueblo de Cuba, al que va dirigido este nuevo acto de venganza, es otro llamado a cerrar filas, a no creer en apariencias, a esperar del agresor siempre lo peor, y a no cejar en la edificación de una sociedad en que la hipocresía, el revanchismo, la indignidad, la mentira y la cobardía que han impulsado un proceso como el nuestro estén bien lejos de ser, como lo son en el vecino imperio, virtudes ciudadanas. 

Esa será la única medida de justicia digna de todas sus víctimas. 

Hasta la Victoria Siempre.

Comunicado de Prensa del Comité Internacional por la Libertad de los Cinco

LA Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos anunció que no revisará el caso de los Cinco Patriotas Cubanos. Esta decisión impide a nuestros Cinco hermanos, injustamente encarcelados desde hace más de una década por monitorear organizaciones terroristas con sede en Miami, tener siquiera la posibilidad a un juicio justo e imparcial fuera de Miami.

El mismo sistema de justicia que niega la posibilidad de revisar el caso de nuestros Cinco hermanos, es el que le ha otorgado 1 año más de gracia a la defensa del terrorista internacional Luis Posada Carriles para que pueda preparar mejor el caso. Es el mismo que deja impune decenas de organizaciones criminales con sede en Miami. El mismo que no investiga una sola denuncia contra quienes atentan contra la vida de nuestros pueblos.

El que ignora el dictamen del Grupo de Trabajo sobre Detenciones Arbitrarias de la ONU que declaró arbitraria e ilegal sus detenciones. Con esta decisión se burla, no solo de la solicitud de los abogados de la defensa, sino del reclamo universal de 10 Premios Nobel, decenas de Juristas, Parlamentarios y Organizaciones que desde todo el mundo expresaron en 12 escritos de "amigos de la corte" la necesidad de revisar el caso plagado de violaciones desde el mismo momento en que los Cinco fueron detenidos.

Nada nos extraña de un sistema que permitió la legalización de la tortura más atroz y acepta impunemente que mientras Cinco inocentes guardan injusta prisión, criminales como Posada, Bosch, Basulto o Frómeta entre tantos otros, paseen libremente por las calles de Miami.

Este día quedará marcado en nuestros calendarios como el día de la vergüenza del sistema judicial de EE.UU y el de la inacción del gobierno de Obama frente a los grupos terroristas que mantienen secuestrada la justicia.

Quedará marcado también como el comienzo de la nueva resistencia que a partir de ahora se hará sentir en todo el mundo hasta que logremos la libertad de Gerardo, Ramón, René, Antonio y Fernando.

Ya no esperaremos a conmemorar otro año de sus arrestos para celebrar una Jornada Internacional de Solidaridad. Se expresará de las mil formas en que los pueblos sabemos transformar el dolor y la indignación en lucha, en las calles frente a las embajadas de EEUU, en las Universidades, en los Parlamentos, en las Iglesias, con nuestros humildes recursos y nuestros modestos medios, pero con toda la fuerza que nos da la verdad y la razón. 

Porque tenemos la certeza que, como dijo Gerardo al conocer la noticia "mientras quede una persona luchando fuera, nosotros seguiremos resistiendo hasta que se haga justicia"

Esta Jornada Internacional por la Libertad de los Cinco comienza hoy y se extenderá cada día de nuestras vidas hasta que regresen libres a su Patria.

Llamamos a nuestros amigos en el mundo a exigir más que nunca al gobierno de Obama que ponga fin a esta colosal injusticia y ordene la Libertad inmediata a los Cinco.

Parlamento cubano llama a multiplicar lucha por Los Cinco

• Declaración de la Presidencia de la Asamblea Nacional

La Corte Suprema de Estados Unidos anunció hoy, sin más explicaciones, su decisión de no revisar el caso de nuestros Cinco compañeros injustamente encarcelados en aquel país por luchar contra el terrorismo anticubano auspiciado por los gobernantes norteamericanos. Los jueces hicieron lo que les pidió la administración de Obama.

A pesar de los sólidos argumentos esgrimidos por los abogados de la defensa ante las evidentes y múltiples violaciones legales cometidas durante todo el proceso, y desconociendo el universal respaldo a esta petición, expresado en una cifra sin precedentes de documentos de "amigos de la Corte", entre ellos, de 10 premios Nobel, centenares de parlamentarios y numerosas organizaciones de juristas internacionales y norteamericanos y de destacadas personalidades políticas y académicas, la Corte Suprema rechazó el caso, ignorando el reclamo de la Humanidad y su obligación de hacer justicia.

Una vez más se manifiesta la arbitrariedad de un sistema corrupto e hipócrita y su cruel ensañamiento con nuestros Cinco hermanos.

Nuestra lucha hasta lograr su liberación no disminuirá ni un instante. Ahora es el momento de reforzar nuestras acciones, sin dejar ni un solo espacio por cubrir ni una sola puerta por tocar.

Estamos seguros que Gerardo, Antonio, Fernando, Ramón y René continuarán, como lo han hecho durante estos casi 11 años, encabezando esta batalla.

Ante la infame decisión Gerardo Hernández Nordelo declaró: "Basado en la experiencia que hemos tenido, no me sorprende la decisión de la Corte Suprema. No tengo ninguna confianza en el sistema de justicia de los Estados Unidos. Ya no queda ninguna duda de que nuestro caso ha sido desde el principio un caso político porque no solo teníamos todos los argumentos legales necesarios para que la Corte lo revise, sino que contamos con el creciente apoyo internacional reflejado en los Amicus presentados a la Corte en nuestro favor. Reitero lo que dije hace un año atrás, el 4 de junio de 2008, que mientras quede una persona luchando fuera, nosotros seguiremos resistiendo hasta que se haga justicia".

La lucha debe multiplicarse hasta obligar al Gobierno norteamericano a poner fin a esta monstruosa injusticia y devolverles la libertad a Gerardo, Ramón, Antonio, Fernando y René.

Presidencia de la Asamblea Nacional del Poder Popular 15 de junio de 2009
 

Estados Unidos le da la espalda a un reclamo mundial de justicia

Oscar Sánchez

"Es un día de vergüenza para aquellos que crean en la posibilidad de justicia del sistema norteamericano y de rabia para muchas personas que en todo el mundo, le pidieron al Tribunal Supremo de Estados Unidos, algo muy sencillo que era revisar el caso de los cinco compañeros. Los jueces prefirieron hacer lo que les pidió la administración del presidente Obama…no acceder a revisar el caso…"

Así se expresó Ricardo Alarcón de Quesada, Presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, al conocer el pasado lunes 15 de junio la decisión de la Corte Suprema de Justicia de los Estados Unidos, de no acceder a revisar el caso de los cinco cubanos luchadores antiterroristas, que guardan injusta prisión en cárceles de ese país.

"Basado en la experiencia que hemos tenido, no me sorprende la decisión de la Corte Suprema. No tengo ninguna confianza en el sistema de justicia de los Estados Unidos. Ya no queda ninguna duda de que nuestro caso ha sido desde el principio un caso político porque no solo teníamos todos los argumentos legales necesarios para que la Corte lo revise, sino que contamos con el creciente apoyo internacional reflejado en los Amicus presentados a la Corte en nuestro favor. Reitero lo que dije hace un año atrás, el 4 de junio de 2008, que mientras quede una persona luchando fuera, nosotros seguiremos resistiendo hasta que se haga justicia".

Fue esa la primera reacción de Gerardo Hernández Nordelo, uno de esos cinco hombres que están tras las rejas por proteger las vidas de sus compatriotas ante las manos asesinas de organizaciones ultraderechistas, terroristas para no cambiarles el nombre, asentadas en territorio de Estados Unidos, que han actuado libremente, confesas además, y con el apoyo de gobiernos de esa nación contra el pueblo cubano, en actos que le han constado la vida a más de 3 000 cubanos.

Presidente Barack Obama, usted, que durante su campaña como candidato presidencial esgrimió el cambio de imagen de Estados Unidos como una de sus etiquetas, que ha dicho que se sentaría a conversar con cualquier adversario, que irrumpió en la escena política como alguien aparte, distinto de todos los candidatos anteriores, que levantó expectativas entre el pueblo norteamericano, tiene en su manos el prestigio, no solo de la justicia de su país, sino el de toda su nación. Tras el rechazo de la máxima autoridad judicial estadounidense en este caso, usted asume la responsabilidad de ese injusto encarcelamiento y en consecuencia es quien puede mostrarle al mundo ese proyecto de un nuevo Estados Unidos.

Cómo hablar de un gran país, de un país de justicia, de un país que dice liderar la lucha contra el terrorismo, si condena a aquellos que luchan contra ese flagelo para salvaguardar las vidas de sus compatriotas y de los propios ciudadanos norteamericanos, como lo hicieron los Cinco; cómo puede ni siquiera acceder la revisión de este caso en su Corte Suprema y mantiene libre a asesinos confesos por la calles de la ciudades de esa nación, como son Luis Posada Carriles y Orlando Bosch.

Presidente Obama es realmente vergonzosa la posición en que cae su gobierno al permanecer como aliado de la injusticia. Bastaría un breve repaso de las opiniones, no las cubanas, sobre el caso para ver cómo se inclina la balanza:

En agosto de 2005, un panel de tres jueces en la Corte de Apelaciones de Atlanta decidió unánimemente que el juicio contra Los Cinco debía ser anulado y recomendó celebrar una nueva audiencia fuera de la ciudad de Miami, Florida.

Ese mismo año, el Grupo de Detenciones Arbitrarias de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) determinó que Los Cinco eran convictos arbitrarios y le sugirió a Washington revisar el proceso penal.

Hace solo dos meses el Consejo de la ciudad de Richmond, California, aprobó por unanimidad una resolución en apoyo a los cinco antiterroristas presos hace una década en Estados Unidos.

Mucho antes, en mayo del 2001, el propio gobierno de Estados Unidos admitió, documentalmente, que no había pruebas para sentenciar a Gerardo Hernández por el cargo de conspiración para cometer asesinato, lo cual quiere decir que este hombre está cumpliendo una condena a perpetuidad por algo de lo que no fue acusado.

¿De que justicia estamos hablando Presidente Obama? Los Cinco no infiltraron al pentágono, ni a la CIA. El líder de la Revolución Cubana, el compañero Fidel, ha dejado claro un concepto que distingue por su ética: nuestra confrontación con Estados Unidos es ideológica y nada tiene que ver con la seguridad de ese país.

No es solo es Cuba la que clama justicia por estos hombres, el llamado mundial le convoca a escuchar señor Presidente. Son esas voces en más de 250 grupos o Comités de Solidaridad en más de 100 naciones las que exigen su libertad.

Diez Premios Nobel entre los que figuran el Presidente de Timor Leste, José Ramos Horta, Adolfo Pérez Esquivel, Rigoberta Menchú, José Saramago, Wole Soyinka, Zhores Alferov, Nadine Gordimer, Günter Grass, Darío Fo y Mairead Maguire; el Senado de México en pleno; la Asamblea Nacional de Panamá; Mary Robinson, presidenta de Irlanda (1992-97) y Alta Comisionada de Derechos Humanos de Naciones Unidas (1997-2002), tres vicepresidentes del parlamento europeo suscribieron los 12 amicus curiae brief, a los que se sumaron cientos de legisladores de todo el mundo. Fue un hecho sin precedentes en la historia judicial de Estados Unidos. Ellos pedían que la Corte revisara el Caso.

¿Puede el Presidente de Estados Unidos darle la espalada al mundo, hacer mutis ante el gigantesco reclamo? Tiene usted en su manos hacer validos los preceptos que tanto defiende de justicia y democracia. Claro que no le será fácil, hay muchos intereses en su país que se enfrentan a cualquier posición justa y ética en relación con Cuba, pero usted tiene la última palabra, mediante una orden presidencial que es derecho constitucional del Presidente de Estados Unidos.

Cuba seguirá luchando, las propias palabras de Gerardo seguiremos resistiendo hasta que se haga justicia y la actitud de Ramón, Fernando, Antonio y René, nos convocan.

jueves, 4 de junio de 2009

Anuncia Chávez ingreso oficial de Ecuador al ALBA

CARACAS, 3 de junio.— El presidente venezolano, Hugo Chávez, informó hoy la próxima incorporación de Ecuador a la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), en reunión a la que deben asistir los presidentes de los países miembros.
En declaraciones en el programa Dando y Dando, de Venezolana de Televisión, el mandatario comentó que el presidente Rafael Correa le ratificó su ingresó al mecanismo regional.
Anunció que ese encuentro para dar ingreso oficial a Ecuador al ALBA será el próximo 24 de junio en el campo de Carabobo, y dijo que este es un mecanismo integrador diferente a cualquier proceso anterior en el continente, que hace énfasis en la lucha contra la pobreza y la exclusión social, y está compuesto por Venezuela, Nicaragua, Dominica, Bolivia, Cuba, Honduras, y San Vicente y las Granadinas.
Los presidentes Hugo Chávez y el líder de la Revolución cubana, Fidel Castro, firmaron el acto de constitución de la plataforma regional el 14 de diciembre del 2004 en La Habana, Cuba. (PL)